¡Alerta de Manga! Japón tiembla (de miedo o de risa)
En el país del sol naciente, donde los terremotos son tan comunes como los ramen instantáneos, una nueva amenaza ha surgido, no desde las profundidades de la Tierra, sino desde las páginas de un manga. Ryo Tatsuki, una artista japonesa, ha desatado una ola de pánico con su obra «The Future I Saw», en la que predice un megatsunami para julio de 2025. ¿Profecía o pura ficción?
La profeta del manga
Ryo Tatsuki no es una vidente cualquiera. En su manga, afirma haber predicho eventos como el terremoto de Tohoku en 2011, las muertes de la princesa Diana y Freddie Mercury, e incluso la pandemia de COVID-19. Ahora, su última visión incluye una ruptura submarina entre Japón y Filipinas que desencadenaría un tsunami tres veces más devastador que el de 2011 .
El efecto dominó en el turismo
La profecía ha tenido un impacto real en el turismo japonés. Agencias de viajes en Hong Kong reportan una caída del 50% en las reservas para Japón durante la Semana Santa, y se espera que la tendencia continúe . Las redes sociales han amplificado el miedo, con hashtags como #July2025Prediction ganando tracción.
¿Ciencia o ciencia ficción?
Los expertos en sismología advierten que, aunque Japón se encuentra en una zona sísmicamente activa, es imposible predecir con precisión cuándo y dónde ocurrirá un terremoto. La Fosa de Nankai, al sur de Japón, tiene un 80% de probabilidad de experimentar un megaterremoto en los próximos 30 años, pero no hay evidencia que respalde una catástrofe inminente en julio de 2025 .
La línea entre realidad y ficción
La historia de Tatsuki plantea preguntas sobre cómo la ficción puede influir en la percepción pública. Aunque su manga es una obra de arte, ha generado ansiedad real entre los turistas y ha afectado la economía japonesa. Es un recordatorio de que, en la era digital, las líneas entre la realidad y la ficción pueden volverse borrosas.
Mientras Japón continúa preparándose para posibles desastres naturales, es esencial distinguir entre predicciones basadas en datos científicos y visiones artísticas. Aunque es prudente estar preparados, no debemos permitir que las profecías de un manga dicten nuestras decisiones. Después de todo, como diría cualquier fan del anime: «¡Eso es solo relleno!»
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