En Cupertino no descansan, y cada vez que parece que ya lo han inventado todo, zas: te sacan otro teléfono con nombre de superhéroe y cara de Tesla. El pasado 30 de abril, Apple presentó al mundo su flamante iPhone Ultra Max. Y sí, el nombre suena a detergente premium, pero el precio lo confirma: desde 1.799 eurazos. ¿Qué trae? ¿Vale la pena? ¿O es solo una excusa más para que tu móvil actual parezca una patata con cámara?
¡Ultra potente, ultra caro y ultra brillante!
Tim Cook apareció en el escenario con su sonrisa de “te voy a vender el mismo móvil otra vez pero mejor disfrazado”, y así fue. El iPhone Ultra Max viene con pantalla OLED de 6,9 pulgadas, resolución 8K (por si necesitas ver los poros de tus selfies), chip A19 Bionic con arquitectura de 3 nanómetros, y una batería que promete durar “todo el día”… siempre y cuando no juegues, no navegues, no llames y no mires memes.
Lo más sonado es su nuevo modo cinematográfico mejorado, que según Apple, convierte a cualquier cuñado en Spielberg. La triple cámara trasera incluye sensores de 48MP, un nuevo ultra gran angular y una teleobjetivo con zoom óptico 10x. Ideal para espiar a tu gato desde la otra habitación.
También presume de estar construido en titanio reciclado, con el típico guiño verde de la marca. Es más resistente, más ligero, y más aspiracional. Porque en el fondo, lo que de verdad compras es estatus. Eso y el derecho a decir en la mesa del bar: “sí, es el nuevo Ultra Max”.
¿Es una revolución? Bueno…
Si tienes el iPhone 15 Pro, no. Si vienes del iPhone 11 o antes, probablemente notarás un salto grande. Pero seamos realistas: muchas de las novedades ya estaban en Android hace siglos. ¿Carga rápida? Bueno… 30W. ¿Puerto USB-C? Sí, por fin, pero casi obligados por la Unión Europea. ¿IA integrada en el sistema? Ahora sí, el Siri vitaminado con Apple Intelligence promete ser más útil que nunca (o al menos, más simpático).
Además, Apple ha presentado iOS 19, con mejoras en privacidad, widgets interactivos y algo llamado “Dynamic Island Pro”, que básicamente es el mismo truco de interfaz, pero con fuegos artificiales.
El veredicto: el mejor iPhone hasta que salga el siguiente
Como siempre, el iPhone Ultra Max es un producto refinado, elegante, y brutalmente caro. ¿Es imprescindible? No. ¿Es deseable? Mucho. Porque Apple no solo vende tecnología: vende sensación de pertenencia. Y en un mundo donde todo cambia tan rápido, un iPhone caro da una falsa pero reconfortante impresión de estabilidad. Como una hipoteca de lujo, pero más brillante.
Si tienes el dinero y te va el postureo (sin juzgar, eh), este móvil es tu nueva joya de bolsillo. Si no, tranquilo, tu viejo iPhone aún hace llamadas y aguanta los memes.
Fuentes consultadas:
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